Quito, Ecuador, amaneció este jueves sumida en el caos y la tensión, marcada por una falsa alerta de bomba que movilizó unidades antiexplosivos en una zona altamente concurrida. Simultáneamente, en la ciudad de Coca, en la Amazonía, un incendio intencional en una discoteca dejó al menos dos personas fallecidas y nueve heridos, en medio de una escalada de violencia que mantiene en vilo al país sudamericano.
ALERTA DE BOMBA DESATA CÁOS
En la capital ecuatoriana, la falsa alerta de bomba se desató cuando una mochila con un supuesto artefacto explosivo fue encontrada en un basurero del Playón de la Marín, cercano a una estación de transporte público. Aunque la zona fue evacuada y se restringió el tránsito, las autoridades descartaron la amenaza tras realizar un exhaustivo procedimiento de “explosión controlada”. A pesar de ser una falsa alarma, la situación generó pánico entre los ciudadanos y paralizó temporalmente el centro de la ciudad.
INCENDIO EN DISCOTECA ECUATORIANA
Simultáneamente, en la ciudad del Coca, un incendio provocado en una discoteca por individuos no identificados dejó como saldo al menos dos personas fallecidas y nueve heridos. El siniestro se extendió a 11 locales, activando un protocolo de seguridad en el centro de salud al que trasladaron las víctimas. La policía está llevando a cabo investigaciones para identificar a los responsables de este acto de violencia.
Estos sucesos se suman a una serie de eventos violentos que han sacudido al país en los últimos días. En la víspera, se registraron al menos cinco incidentes similares en diversos sectores de la capital, con la colocación de explosivos en vehículos, un puente peatonal y cerca de una cárcel. Aunque estos ataques no dejaron víctimas o heridos, sí ocasionaron daños materiales, confirmó la policía.
ECUADOR EN “ESTADO DE GUERRA”
Estos acontecimientos tienen lugar en medio de un estado de emergencia declarado por el presidente Daniel Noboa, quien afirmó que Ecuador ha entrado en un conflicto armado interno debido a la violencia desatada por grupos del crimen organizado y el narcotráfico. La fuga de líderes criminales, como Adolfo Macías alias “Fito”, ha agravado la crisis, junto con la fuga de Fabricio Colón Pico, un capo de Los Lobos.
El gobierno de Noboa ha desplegado cientos de militares y policías para custodiar infraestructuras estratégicas y medios de comunicación en Quito y Guayaquil, buscando restaurar la normalidad en el país. Hasta el momento, la violencia callejera ha dejado al menos 14 muertos, retención de personal penitenciario por parte de presos, y numerosos ataques armados.
En una entrevista a la emisora Radio Canela, el presidente Noboa afirmó que Ecuador se encuentra en estado de guerra y destacó la necesidad de enfrentar la crisis con determinación. Señaló que su gobierno está luchando contra grupos terroristas que, según él, cuentan con más de 20 mil miembros. Advertió a jueces y fiscales que también se les procesará si colaboran con estas bandas.
La comunidad internacional ha expresado su preocupación por la situación en Ecuador. Perú ha desplegado más de medio millar de efectivos en la frontera, mientras que la ONU, Estados Unidos, España y la Unión Europea han manifestado solidaridad y disposición para cooperar con el gobierno ecuatoriano.