Hasta los huesos: Grigoriyev adopta a un animal que lo devora

En una historia que comenzó con un acto de buena voluntad y terminó en tragedia, Sergey Grigoriyev, un hombre de origen ruso, adoptó una cría de oso pardo en un bosque de Rusia y lo crió como su propia ‘mascota’. Sin embargo, lo que parecía ser una relación peculiar y única tuvo un desenlace aterrador.

El incidente se remonta a 2018, cuando Grigoriyev desapareció sin dejar rastro. Preocupada por su paradero, su familia presentó una denuncia ante la policía. La sorpresa y horror llegaron cuando se descubrió que el oso que Grigoriyev había adoptado como cría lo había devorado por completo, hasta los huesos.

El hombre había rescatado al oso cuando era joven y lo cuidó durante cuatro años. Sin embargo, informes indican que la ‘mascota’ ya había mostrado conductas violentas hacia su dueño en el pasado. A pesar de las advertencias de personas cercanas, quienes le recomendaron no quedarse con el oso salvaje debido a ataques anteriores, Grigoriyev desestimó los consejos, llevando a un trágico desenlace.

El incidente resalta los peligros de mantener animales salvajes como mascotas y subraya la importancia de escuchar las advertencias y consejos de expertos en la conservación animal. La historia de Sergey Grigoriyev sirve como recordatorio de los riesgos asociados con la interacción cercana con animales silvestres, incluso cuando son criados desde jóvenes.