Bracomente se niega a dejar la dirigencia Estatal de Morena
La dirigencia estatal de Morena en Puebla está a la disputa entre Edgar Garmendia y Mario Bracomente. Pese a la intervención del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del partido en Puebla, ambos personajes están actuando como líderes estatales.
Edgar Garmendia fue nombrado por los Lujanistas como secretario general con funciones de dirigente, mientras que Mario Bracamonte sigue realizando actividades como delegado presidente, a pesar de que fue destituido la semana pasada, tras el documento emitido por el CEN que informaba la destitución de todos los dirigentes y secretarios nombrados por Yeidckol Polevnsky.
Los Claudistas, abdalistas y lujanistas siguen buscando hacerse de la dirigencia estatal del Partido al grado de oponerse a las órdenes dadas por el dirigente nacional Alfonso Ramírez Cuellar, quien, al momento de revocar a los funcionarios, pidió a los Consejos Estatales esperar indicaciones para tener un dirigente estatal interino.
Por su parte, el diputado federal Alejandro Carvajal afirmó que tras las decisiones que se tomaron desde el Comité Ejecutivo Nacional, Edgar Garmendia es el secretario general con funciones de presidente del Comité Directivo Estatal según lo que marcan los estatutos de Morena.
Mientras que Mario Bracamonte, quien fue destituido la semana pasada de su cargo como dirigente estatal, presumió a través de sus redes sociales que sigue realizando funciones como delegado estatal, publicando que acudió a la inauguración de las oficinas municipales de Morena en Huauchinango.
Debido a la contingencia nacional que se vive para prevenir el contagio del COVID-19, Morena no está realizará su método de renovación de la dirigencia Nacional y Estatal por medio de asambleas ya que representa la congregación masiva de personas, por lo que se está pensando en la alternativa de las encuestas.
Carvajal, reconoció que no solo el COVID-19 es un impedimento para realizar sus asambleas, sino el hecho de que el INE validó solo a un padrón de 270 mil militantes de los 2 millones que tiene Morena registrados. Por lo que en el Congreso Nacional plantearon un posible panorama donde se ratificarían a los consejeros que habían sido electos en las asambleas del 2019 que canceló el INE.
Para ello el Congreso Nacional estableció entre las condiciones que los nuevos dirigentes o funcionarios internos de Morena que tengan un cargo en cualquier nivel de gobierno deben renunciar a su puesto, de lo contrario no podrían tomar protesta, la convocatoria para las renovaciones de los Comités Ejecutivos Estatales y el Comité Ejecutivo Nacional se emitirá el próximo 29 de marzo.