Ciudad
Congreso de Puebla aprueba reforma al Poder Judicial
El Congreso de Puebla dio luz verde a la reforma al Poder Judicial de la Federación (PJF), promovida por el presidente Andrés Manuel López Obrador, en un ambiente marcado por fuertes protestas y estrictas medidas de seguridad. Con esta aprobación, Puebla se convierte en el decimotercer estado en respaldar el proyecto, acercándolo a la validación nacional, que requiere el aval de al menos 17 Congresos locales.
Sesión acelerada y manifestaciones fuera del recinto
Tras la aprobación del dictamen en el Senado, el Congreso poblano fue uno de los primeros en recibir la propuesta, la cual fue rápidamente turnada a la Comisión de Gobernación y Puntos Constitucionales.
Esta comisión convocó a una sesión extraordinaria, programada con poco tiempo de anticipación, para someter a votación la iniciativa, que busca, entre otras cosas, modificar la manera en que se eligen los magistrados, estableciendo que sea por voto popular.
Mientras los legisladores debatían, en las afueras del Congreso, ubicado en el centro de Puebla, decenas de manifestantes, entre ellos trabajadores del Poder Judicial y estudiantes, mostraban su rechazo a la reforma. La protesta escaló cuando los inconformes lograron derribar las vallas de seguridad y llegaron a las puertas del recinto, en un intento por ingresar al interior.
Aunque estuvieron cerca de lograrlo, el personal de seguridad reforzó las entradas, evitando que la situación se saliera de control.
Tensión en el pleno y tácticas de la oposición
Dentro del Congreso, los diputados del Partido Acción Nacional (PAN) intentaron postergar la votación, argumentando que el dictamen no se había entregado con el tiempo estipulado por la ley. El coordinador del PAN, Rafael Micalco Méndez, criticó la rapidez del proceso, calificándolo como una violación a las normativas internas. En respuesta, la bancada panista solicitó que se leyera íntegramente el documento, extendiendo la sesión de manera significativa.
Durante el debate, los diputados del PAN, como Miguel Espinosa de los Monteros y Guadalupe Leal Rodríguez, se pronunciaron en contra de la reforma, acusando a la mayoría legislativa de actuar de manera apresurada y sin el debido análisis.
A pesar de sus esfuerzos, el bloque conformado por Morena y sus aliados del PT y PVEM impuso su mayoría, logrando que la reforma fuera aprobada con 28 votos a favor y 10 en contra.